
De extraordinaria sonrisa, cabello negro, movimientos sutiles y hablar sereno, Alejandra Robles contagia su alegría y paz a quien la ve o escucha. Oaxaqueña que en su voz encontró el instrumento para brindarse a los demás sin reservas y, que hoy, es una digna exponente de la música popular mexicana.
Era Junio de 2006, el cd.“La Malagueña” (de Alejandra Robles) se expendía en un stand de la feria de arte México Puerta de las Américas, justo a un costado del espacio donde se promovían las pastorelas de Miguel Sabido.
—Hola, dije.
—Hola, contestó sonriendo Alejandra.
—¿Qué tal?, vengo de Guerrero.
—Extraordinario, que bello pueblo, de allá es mi abuelo.
De entonces a la fecha he seguido a la Robles en su andar, visitas a su página web, mails, comprar su disco y escucharlo. Un día la vi aparecer en televisión durante la emisión del programa Animal Nocturno de TV Azteca, mi abuela pasaba cerca del televisor y al escuchar Cucurrucucu paloma dijo “Que bonito canta” (refiriéndose a Alejandra), yo contesté muy orgulloso “Sí, es mi amiga”…Mi abuela no me creyó.
En este cuarto número de la ahora revista (que ya no gaceta) El Arte Vivo, he recogido las experiencias de esta joven cantante durante las diferentes etapas de su proceso artístico. Por chat (MSN) hemos platicado lo siguiente:
B r i t o dice:
Hola Ale, buenas noches.
Alejandra dice:
Hola, buenas noches. ¿Ya listísimo?
B r i t o dice:
Oye que gusto que me hayas contestado jeje.
Alejandra dice:
No, al contrario, gracias.
B r i t o dice:
Bien, el tema de este bimestre en la revista es el artista y su proceso.
Alejandra dice:
Ok
B r i t o dice:
He retomado algunos datos de la biografía que aparece en tu web.
Alejandra dice:
Sí.
B r i t o dice:
Empecemos por tu infancia, la vives en Puerto Escondido, y ahí, tienes contacto con la música a través de tu abuelo principalmente, ¿qué recuerdos significativos guardas de aquel momento?
Alejandra dice:
Sí bueno, el abuelo fue mi primer contacto con la música tradicional mexicana, el vivía de la música. A parte mi padre era cantante y guitarrista. Ya sé que suena trillado pero, la música siempre estuvo presente en la casa.
El inicio fue complejo, a los 12 años a mi me gustaba el canto mas le tenía miedo a esa carrera, ya que mi idea del cantante en ese entonces era solamente lo que nos anunciaba Televisa y lo veía como algo muy, muy lejano.
B r i t o dice:
¿Cómo cambias esa visión?.
Alejandra dice:
Poco a poco fui creciendo y conociendo gente que me inspiraron y me hicieron ver una faceta diferente del cantante, que no era para nada comercial. Amigos míos que se dedicaban a la música.
B r i t o dice:
Algunos nombres...
Alejandra dice:
Por ponerte un ejemplo: en esa época yo era una niña de 13 años y me tocó ver surgir a las cantantes de Oaxaca.
B r i t o dice:
Ah, gente como Lila Downs.
Alejandra dice:
Jejejeje
B r i t o dice:
¿Esa risa? Jejejejeje.
Alejandra dice:
Sí, y como Susana Harp, Gustavo López, Georgina Meneses, Ana Díaz, Lorena Vera. Más las que fui conociendo por mi propia cuenta, que ya no pertenecían a mi mundo.
B r i t o dice:
Oye, pero en tu adolescencia también te dedicaste a la fotografía, a la danza folklórica y al baile de salón, ¿qué te deja todo ello como artista?
Alejandra dice:
Fíjate que tuve la oportunidad de trabajar con gente muy reconocida en la foto, gente que admiraba muchísimo, como Graciela Iturbide, Rogelio Cuellar, Francisco Toledo.
Gente que me marco muy, muy fuerte, y que me enseñaron a ver la vida de otra manera.
De alguna forma, me gustaría poder plasmar mi música como ellos lo hacen con su lente o con su pincel.
B r i t o dice:
Envuelta en todas esas actividades y con gente tan importante de las diferentes artes a tu alrededor, ¿cómo es que se impone tu gusto por el canto?, ¿qué te lleva a tomar la determinación de estudiar canto y no fotografía? por ejemplo.
Alejandra dice:
Retratar a nuestro país a través de las canciones.
B r i t o dice:
¿Un trabajo como el de los artistas plásticos, pero con tu voz?
Alejandra dice:
Mira, cuando yo trabajé con ellos, yo no tenía claro qué debía de ser en esta vida, me dolía mucho verlos a ellos tan grandes y yo tan pequeña sin tener un camino claro. Me di cuenta que la foto no me llenaba como me llena el escenario, el poder mezclar poesía con música y baile. Una canción es como una foto, también, donde se guardan los recuerdos, las vivencias, las tradiciones, por ejemplo la llorona, en ese son istmeño de Oaxaca yo claramente puedo ver una foto de Graciela, la mujer de las iguanas, etc.
B r i t o dice:
A distancia, ¿qué podrías decir que te deja el contacto con toda esa gente, con todos esos maestros?.
Alejandra dice:
Me dejan una visión incansable de su trabajo, nunca es suficiente, jamás. Nunca está bien hecho su trabajo. Hay una exigencia consigo mismos tremenda, y yo soy así, soy muy tirana conmigo misma y con mi trabajo, nunca estoy conforme.
B r i t o dice:
Después de aquel contacto y enseñanzas, sucede que ingresas a la Escuela de Artes de Oaxaca, estando ahí, ¿cómo visualizas tu futuro de artista?, ¿te ves ya desde entonces recorriendo el país con tus canciones?
Alejandra dice:
Pues creo que antes tenía más sueños que ahora, volaba mucho, ahora sé lo que hay y veo a mi país con los ojos bien abiertos y con los pies bien puestos sobre la tierra. Hay poco apoyo para el artista, nunca hay recursos, es terrible la situación., no me imagino recorriendo el país, no hay trabajo en México, hay que irse.
B r i t o dice:
Es una realidad triste la del artista cuando se ama al país donde se vive, cuando se le canta a su tierra, cuando se pinta esa tierra, cuando se escribe sobre esa tierra y hay que dejarla por falta de oportunidades, ¿no crees?.
Alejandra dice:
Así es, ahí está el ejemplo de todos los migrantes mexicanos, no sólo los artistas.
B r i t o dice:
No todos los mexicanos tenemos la oportunidad de salir del país, tu tuviste la experiencia de haber vivido en el extranjero, radicaste en París, estudiaste allá, ¿con qué te confrontó esa experiencia?
Alejandra dice:
Me confronté con la preparación que desde chicos los europeos tienen para sus hijos, en cada barrio hay un conservatorio de música, hay un gimnasio grande, hay una biblioteca a la cual tu tienes derecho y no tienes que pagar, eso marca tu destino.
B r i t o dice:
Después de estudiar en Francia regresaste a México a estudiar canto clásico en la Universidad de Veracruz, ¿cómo fue el proceso hasta llegar a la decisión de dedicarte al canto popular mexicano?
Alejandra dice:
Jaja, sí, pues mira, en la escuela nos prohibían cantar música popular. De verdad era increíble, lo tenias que hacer ha escondidas porque si no te reprobaban. Después me encontré con otro problema, cómo cantar un son jarocho sin la técnica operística, ya que yo quería que sonara a pueblo, así como de mercado. Entonces tuve que empezar a imitar a mis amigos los jaraneros y empezar a experimentar con una forma de canto totalmente diferente, como más gritada. Eso me llevó muchos años.
B r i t o dice:
¿Eso te llevó a recorrer las calles de Veracruz en busca de esos recursos? o ¿dónde los buscaste?
Alejandra dice:
Los busco y los encuentro en los fandangos, imitando. No fue muy difícil enamorarme de inmediato de las fiestas de los veracruzanos, éstas a las que se les llama fandango, que vienen de España. Ahí la gente que quiere aprender se sube a cantar, a tocar, a bailar y cuidadito te equivocas porque te sacan de la tarima. Jajaja.
B r i t o dice:
¿Y Oaxaca?, ¿buscas también en Oaxaca, tu tierra?
Alejandra dice:
Oaxaca siempre estará presente. A veces cuando me enojo conmigo y digo ya no voy a cantar, solamente con una vuelta por sus maravillosas calles de cantera verde y el cielo en tu cabeza, el mar de la costa, el mezcal de gusano, el mercado Benito Juárez, los chapulines, los colores, los hilos, las combinaciones, los artistas que caminan en sus calles como si flotaran (como si no estuvieran), la banda de música, las tehuanas, la belleza de la gente de costa y no acabaría de enumerar.
B r i t o dice:
Bien, ahora decides emprender tu rumbo con un cd. producido de forma independiente, donde le cantas a México a través de letras y melodías tradicionales de Oaxaca y Veracruz. Platícame de ello.
Alejandra dice:
Es un disco en donde yo plasmo mis influencias musicales. Cosas de Oaxaca, de la costa de donde yo soy, pero también hermosas melodías de Veracruz que aprendí viviendo allá. Otras que le dedico a mis amores y una pieza de Venezuela que nos habla de la luna y sus leyendas.
B r i t o dice:
¿Qué te ha implicado este disco?.
Alejandra dice:
Tuve mucha suerte de encontrar en mi camino a Luis García Ireta, tremendo músico defeño, roquero de corazón. Él es una parte importantísima, yo trabajé con otros arreglistas muy buenos, músicos reconocidos, pero no, y con Luis nos entendimos de inmediato, hacemos los arreglos juntos, yo le doy ideas y él me entiende a la perfección, es una bendición en mi vida.
Ahora bien, este disco me cambia la vida, una cosa es decir quiero un disco y otra es tenerlo, promoverlo y hacer que la gente lo escuche. Me saqué el diablo que andaba cargando. Ahora ya estoy haciendo el segundo disco y va a ser una cosa muy diferente.
B r i t o dice:
¿El proceso de tu disco cómo ha sido?, su producción, distribución y promoción.
Alejandra dice:
Bueno, la producción ejecutiva fue mía, es una producción independiente, las fotos del disco son diseños míos, la portada es un autorretrato, el diseño lo hice junto con un amigo de Oaxaca, la distribución la hacemos entre Luis García y yo a excepción de mix-up que la tiene xquenda. La promoción: pues tocando puertas, el Sr. Ricardo Rocha es una persona a la que le estoy muy agradecida pues me apoya en el momento que se lo pida, en noviembre estaremos con Armando Manzanero. Hay que tocar puertas, ir a la radio, prensa. La promoción es una cosa incansable, nunca para.
B r i t o dice:
Bien, muchísimas gracias Alejandra, ha sido una charla muy rica.
Alejandra dice:
No, gracias a ti.
Por Gabriel Brito.
A mis amigas Irene Sabido y Marisol Vázquez (Marola).
*Entrevista publicada en el cuarto número de la revista El arte vivo,
marzo- abril de 2007.
Era Junio de 2006, el cd.“La Malagueña” (de Alejandra Robles) se expendía en un stand de la feria de arte México Puerta de las Américas, justo a un costado del espacio donde se promovían las pastorelas de Miguel Sabido.
—Hola, dije.
—Hola, contestó sonriendo Alejandra.
—¿Qué tal?, vengo de Guerrero.
—Extraordinario, que bello pueblo, de allá es mi abuelo.
De entonces a la fecha he seguido a la Robles en su andar, visitas a su página web, mails, comprar su disco y escucharlo. Un día la vi aparecer en televisión durante la emisión del programa Animal Nocturno de TV Azteca, mi abuela pasaba cerca del televisor y al escuchar Cucurrucucu paloma dijo “Que bonito canta” (refiriéndose a Alejandra), yo contesté muy orgulloso “Sí, es mi amiga”…Mi abuela no me creyó.
En este cuarto número de la ahora revista (que ya no gaceta) El Arte Vivo, he recogido las experiencias de esta joven cantante durante las diferentes etapas de su proceso artístico. Por chat (MSN) hemos platicado lo siguiente:
B r i t o dice:
Hola Ale, buenas noches.
Alejandra dice:
Hola, buenas noches. ¿Ya listísimo?
B r i t o dice:
Oye que gusto que me hayas contestado jeje.
Alejandra dice:
No, al contrario, gracias.
B r i t o dice:
Bien, el tema de este bimestre en la revista es el artista y su proceso.
Alejandra dice:
Ok
B r i t o dice:
He retomado algunos datos de la biografía que aparece en tu web.
Alejandra dice:
Sí.
B r i t o dice:
Empecemos por tu infancia, la vives en Puerto Escondido, y ahí, tienes contacto con la música a través de tu abuelo principalmente, ¿qué recuerdos significativos guardas de aquel momento?
Alejandra dice:
Sí bueno, el abuelo fue mi primer contacto con la música tradicional mexicana, el vivía de la música. A parte mi padre era cantante y guitarrista. Ya sé que suena trillado pero, la música siempre estuvo presente en la casa.
El inicio fue complejo, a los 12 años a mi me gustaba el canto mas le tenía miedo a esa carrera, ya que mi idea del cantante en ese entonces era solamente lo que nos anunciaba Televisa y lo veía como algo muy, muy lejano.
B r i t o dice:
¿Cómo cambias esa visión?.
Alejandra dice:
Poco a poco fui creciendo y conociendo gente que me inspiraron y me hicieron ver una faceta diferente del cantante, que no era para nada comercial. Amigos míos que se dedicaban a la música.
B r i t o dice:
Algunos nombres...
Alejandra dice:
Por ponerte un ejemplo: en esa época yo era una niña de 13 años y me tocó ver surgir a las cantantes de Oaxaca.
B r i t o dice:
Ah, gente como Lila Downs.
Alejandra dice:
Jejejeje
B r i t o dice:
¿Esa risa? Jejejejeje.
Alejandra dice:
Sí, y como Susana Harp, Gustavo López, Georgina Meneses, Ana Díaz, Lorena Vera. Más las que fui conociendo por mi propia cuenta, que ya no pertenecían a mi mundo.
B r i t o dice:
Oye, pero en tu adolescencia también te dedicaste a la fotografía, a la danza folklórica y al baile de salón, ¿qué te deja todo ello como artista?
Alejandra dice:
Fíjate que tuve la oportunidad de trabajar con gente muy reconocida en la foto, gente que admiraba muchísimo, como Graciela Iturbide, Rogelio Cuellar, Francisco Toledo.
Gente que me marco muy, muy fuerte, y que me enseñaron a ver la vida de otra manera.
De alguna forma, me gustaría poder plasmar mi música como ellos lo hacen con su lente o con su pincel.
B r i t o dice:
Envuelta en todas esas actividades y con gente tan importante de las diferentes artes a tu alrededor, ¿cómo es que se impone tu gusto por el canto?, ¿qué te lleva a tomar la determinación de estudiar canto y no fotografía? por ejemplo.
Alejandra dice:
Retratar a nuestro país a través de las canciones.
B r i t o dice:
¿Un trabajo como el de los artistas plásticos, pero con tu voz?
Alejandra dice:
Mira, cuando yo trabajé con ellos, yo no tenía claro qué debía de ser en esta vida, me dolía mucho verlos a ellos tan grandes y yo tan pequeña sin tener un camino claro. Me di cuenta que la foto no me llenaba como me llena el escenario, el poder mezclar poesía con música y baile. Una canción es como una foto, también, donde se guardan los recuerdos, las vivencias, las tradiciones, por ejemplo la llorona, en ese son istmeño de Oaxaca yo claramente puedo ver una foto de Graciela, la mujer de las iguanas, etc.
B r i t o dice:
A distancia, ¿qué podrías decir que te deja el contacto con toda esa gente, con todos esos maestros?.
Alejandra dice:
Me dejan una visión incansable de su trabajo, nunca es suficiente, jamás. Nunca está bien hecho su trabajo. Hay una exigencia consigo mismos tremenda, y yo soy así, soy muy tirana conmigo misma y con mi trabajo, nunca estoy conforme.
B r i t o dice:
Después de aquel contacto y enseñanzas, sucede que ingresas a la Escuela de Artes de Oaxaca, estando ahí, ¿cómo visualizas tu futuro de artista?, ¿te ves ya desde entonces recorriendo el país con tus canciones?
Alejandra dice:
Pues creo que antes tenía más sueños que ahora, volaba mucho, ahora sé lo que hay y veo a mi país con los ojos bien abiertos y con los pies bien puestos sobre la tierra. Hay poco apoyo para el artista, nunca hay recursos, es terrible la situación., no me imagino recorriendo el país, no hay trabajo en México, hay que irse.
B r i t o dice:
Es una realidad triste la del artista cuando se ama al país donde se vive, cuando se le canta a su tierra, cuando se pinta esa tierra, cuando se escribe sobre esa tierra y hay que dejarla por falta de oportunidades, ¿no crees?.
Alejandra dice:
Así es, ahí está el ejemplo de todos los migrantes mexicanos, no sólo los artistas.
B r i t o dice:
No todos los mexicanos tenemos la oportunidad de salir del país, tu tuviste la experiencia de haber vivido en el extranjero, radicaste en París, estudiaste allá, ¿con qué te confrontó esa experiencia?
Alejandra dice:
Me confronté con la preparación que desde chicos los europeos tienen para sus hijos, en cada barrio hay un conservatorio de música, hay un gimnasio grande, hay una biblioteca a la cual tu tienes derecho y no tienes que pagar, eso marca tu destino.
B r i t o dice:
Después de estudiar en Francia regresaste a México a estudiar canto clásico en la Universidad de Veracruz, ¿cómo fue el proceso hasta llegar a la decisión de dedicarte al canto popular mexicano?
Alejandra dice:
Jaja, sí, pues mira, en la escuela nos prohibían cantar música popular. De verdad era increíble, lo tenias que hacer ha escondidas porque si no te reprobaban. Después me encontré con otro problema, cómo cantar un son jarocho sin la técnica operística, ya que yo quería que sonara a pueblo, así como de mercado. Entonces tuve que empezar a imitar a mis amigos los jaraneros y empezar a experimentar con una forma de canto totalmente diferente, como más gritada. Eso me llevó muchos años.
B r i t o dice:
¿Eso te llevó a recorrer las calles de Veracruz en busca de esos recursos? o ¿dónde los buscaste?
Alejandra dice:
Los busco y los encuentro en los fandangos, imitando. No fue muy difícil enamorarme de inmediato de las fiestas de los veracruzanos, éstas a las que se les llama fandango, que vienen de España. Ahí la gente que quiere aprender se sube a cantar, a tocar, a bailar y cuidadito te equivocas porque te sacan de la tarima. Jajaja.
B r i t o dice:
¿Y Oaxaca?, ¿buscas también en Oaxaca, tu tierra?
Alejandra dice:
Oaxaca siempre estará presente. A veces cuando me enojo conmigo y digo ya no voy a cantar, solamente con una vuelta por sus maravillosas calles de cantera verde y el cielo en tu cabeza, el mar de la costa, el mezcal de gusano, el mercado Benito Juárez, los chapulines, los colores, los hilos, las combinaciones, los artistas que caminan en sus calles como si flotaran (como si no estuvieran), la banda de música, las tehuanas, la belleza de la gente de costa y no acabaría de enumerar.
B r i t o dice:
Bien, ahora decides emprender tu rumbo con un cd. producido de forma independiente, donde le cantas a México a través de letras y melodías tradicionales de Oaxaca y Veracruz. Platícame de ello.
Alejandra dice:
Es un disco en donde yo plasmo mis influencias musicales. Cosas de Oaxaca, de la costa de donde yo soy, pero también hermosas melodías de Veracruz que aprendí viviendo allá. Otras que le dedico a mis amores y una pieza de Venezuela que nos habla de la luna y sus leyendas.
B r i t o dice:
¿Qué te ha implicado este disco?.
Alejandra dice:
Tuve mucha suerte de encontrar en mi camino a Luis García Ireta, tremendo músico defeño, roquero de corazón. Él es una parte importantísima, yo trabajé con otros arreglistas muy buenos, músicos reconocidos, pero no, y con Luis nos entendimos de inmediato, hacemos los arreglos juntos, yo le doy ideas y él me entiende a la perfección, es una bendición en mi vida.
Ahora bien, este disco me cambia la vida, una cosa es decir quiero un disco y otra es tenerlo, promoverlo y hacer que la gente lo escuche. Me saqué el diablo que andaba cargando. Ahora ya estoy haciendo el segundo disco y va a ser una cosa muy diferente.
B r i t o dice:
¿El proceso de tu disco cómo ha sido?, su producción, distribución y promoción.
Alejandra dice:
Bueno, la producción ejecutiva fue mía, es una producción independiente, las fotos del disco son diseños míos, la portada es un autorretrato, el diseño lo hice junto con un amigo de Oaxaca, la distribución la hacemos entre Luis García y yo a excepción de mix-up que la tiene xquenda. La promoción: pues tocando puertas, el Sr. Ricardo Rocha es una persona a la que le estoy muy agradecida pues me apoya en el momento que se lo pida, en noviembre estaremos con Armando Manzanero. Hay que tocar puertas, ir a la radio, prensa. La promoción es una cosa incansable, nunca para.
B r i t o dice:
Bien, muchísimas gracias Alejandra, ha sido una charla muy rica.
Alejandra dice:
No, gracias a ti.
Por Gabriel Brito.
A mis amigas Irene Sabido y Marisol Vázquez (Marola).
*Entrevista publicada en el cuarto número de la revista El arte vivo,
marzo- abril de 2007.